Chicago (EE.UU.), 20 dic (EFE).- Los Ángeles Lakers perdieron este miércoles en Chicago contra los Bulls su cuarto partido en los últimos cinco en la NBA (124-108), al estrellarse ante una excelente actuación grupal de los locales, en los que DeMar DeRozan lideró a un grupo de ocho jugadores por encima de los diez puntos.
Tras levantar al cielo de Las Vegas la primera edición de la Copa de la NBA, los Lakers se atascaron en la NBA y bajaron a la novena posición el Oeste con un balance de quince victorias y trece derrotas.
LeBron James, quien estaba en duda para este partido al arrastrar unas molestias de pantorrilla, fue titular en el quinteto de Darvin Ham y rozó el triple doble con 25 puntos, diez rebotes y nueve asistencias, mientras que Anthony Davis, también frenado por un problema en el tobillo izquierdo, firmó un doble doble de 19 puntos y catorce rebotes.
Pero los Lakers fueron superados por unos Bulls al alza, que cambiaron la dinámica de su temporada en las últimas semanas y que ganaron ahora siete de sus últimos diez partidos, una racha que coincidió con la ausencia de Zach LaVine por lesión y que deja aún más en el aire el futuro del jugador procedente de UCLA.
Los Bulls tiraron con el 54.4 % de acierto (48 de 88) y con el 52.9 % de acierto en triples (18 de 34), liderados por un DeRozan de 27 puntos, siete rebotes y nueve asistencias (12 de 16 en tiros de campo).
Todo el quinteto titular de los Bulls acabó por encima de los trece puntos. Coby White, que dio un paso al frente ante la baja de LaVine, metió 17, Patrick Williams y Alex Caruso anotaron quince, mientras que Nikola Vucevic aportó trece y diez rebotes.
Además, Ayo Dosunmu firmó catorce, Andre Drummond metió once y Jevon Carter, diez saliendo del banquillo.
Los Bulls tienen ahora un balance de 12-17 en el Este, tras comenzar con un modesto 5-14.
DeRozan, al frente
Estuvieron por encima del 50 % en tiros de campo los Bulls y, liderados por Caruso, White y DeRozan, alcanzaron los 18 puntos de ventaja en el 48-30 frente a unos Lakers en los que LeBron y Davis fueron los únicos anotadores durante los primeros siete minutos de partido.
Los Bulls jugaron con ritmo y de manera grupal, pero se atascaron a mediados del segundo período y los Lakers lo aprovecharon para recortar distancias. LeBron sumaba ya quince puntos, cinco rebotes y cinco asistencias al descanso y los Lakers redujeron el margen hasta los dos puntos, cuando un triple de Reaves subió el 51-53 al luminoso.
Los seis puntos de desventaja con los que los Lakers regresaron a los vestuarios (61-55) representaban casi una victoria para el equipo de Darvin Ham.
Tras un arranque protagonizado por LeBron y Reaves, los Lakers aumentaron el nivel y Taurean Prince (13 puntos) y Reaves (11 al descanso y 21 en total) ya habían entrado en el partido.
LeBron cortó el margen a un sólo punto en el 63-64 al comienzo del tercer período, pero los Bulls no temblaron y consiguieron responder al empuje de los Lakers.
Con el 76-60 en el luminoso, Davis acabó tendido al suelo tras un choque con White y se dañó un tobillo. Regresó al banquillo unos minutos y, sin él ni LeBron en pista, los Bulls volvieron a escaparse.
Un triple de White, un potente mate de Drummond y un robo de DeRozan a Prince para otro mate subió el 90-75 al marcador.
LeBron fue el último en rendirse. Recortó el margen a nueve puntos al comienzo del cuarto período, con una canasta y libre añadido. Enseñó los músculos al United Center, pero los Bulls respondieron.
Un triple de White dio de nuevo catorce puntos de ventaja a los Bulls en el 101-87 y los repetidos fallos y balones perdidos pasaron factura a los Lakers.
DeRozan siguió anotando a placer y un triple de Vucevic colocó la virtual sentencia en el 120-103 con 2.21 por jugar.
Andrea Montolivo