Washington, 19 dic (EFE).- Estados Unidos está considerando incluir de nuevo a los rebeldes hutíes de Yemen en su lista de grupos terroristas, en respuesta a los ataques contra barcos vinculados a Israel en el mar Rojo.
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, señaló en una rueda de prensa este miércoles que la Administración de Joe Biden está “evaluando ahora mismo” si incluir a los hutíes en la lista es “la decisión adecuada”.
“Tienen que parar los ataques, es completamente inaceptable, haremos todo lo posible junto con nuestros aliados para contrarrestar estas amenazas”, agregó el portavoz.
Poco después de asumir la presidencia, en febrero de 2021, Biden retiró a los rebeldes hutíes de la lista de grupos terroristas, dando marcha atrás a una decisión del Gobierno del expresidente Donald Trump (2017-2021).
La Administración demócrata tomó esa decisión ante la “nefasta situación humanitaria en Yemen” y para evitar dificultar el acceso de los yemeníes a alimentos o combustible.
Cuando un grupo es añadido a la lista de organizaciones terroristas de EE.UU., se le prohíbe a sus miembros la entrada al país y se le otorga al Departamento de Tesoro la capacidad de congelar sus activos y cualquier transacción financiera relacionada con ellos.
Desde entonces y ante los ataques de los rebeldes a Emiratos Árabes, la Administración demócrata ha amenazado con nombrarlos de nuevo como un grupo terrorista.
Las declaraciones de Kirby se dan un día después de que EE.UU. anunciara la creación de una nueva coalición militar de 10 países, incluido España, para contrarrestar los ataques hutíes en el mar Rojo.
Los rebeldes respondieron que siguen determinados a atacar los barcos vinculados con Israel que transiten frente a las costas de Yemen, en apoyo a la franja de Gaza.
Tras el inicio de la ofensiva de Israel en Gaza, los hutíes han lanzado varias andanadas de misiles y drones contra el sur de Israel y también contra buques con la bandera del Estado judío o propiedad de empresas israelíes en el mar Rojo y el estrecho de Bab al Mandeb, que conecta dicho mar con el golfo de Adén.
Desde el pasado viernes, los principales grupos de transporte marítimo han ido anunciando que suspenden sus operaciones en el mar Rojo, entre ellos Maersk y Hapag-Lloyd, y ayer se les sumó la petrolera BP, al cancelar temporalmente el paso de sus embarcaciones por la zona.
El conflicto armado en el Yemen comenzó en 2014 cuando los rebeldes hutíes ocuparon Saná y otras provincias del país, y la contienda se recrudeció con la intervención de la coalición árabe, con apoyo de Estados Unidos, en marzo de 2015. EEFE
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