Nacho García
Redacción Deportes (EE.UU.), 12 dic (EFE).- El club de la 'vergüenza' en la NBA está formado por tres equipos que han perdido cualquier opción de competir en apenas mes y medio de temporada. San Antonio Spurs, Detroit Pistons y Washington Wizards acumulan 51 derrotas consecutivas ante el resto de equipos, y 'pelean' por el dudoso honor de ser el peor equipo de la liga.
La situación podría ser peor teniendo en cuenta que el último en ganar fue Washington, y lo hizo precisamente ante Detroit (107-126). Alguno tenía que imponerse y maquillar sus números, que son realmente preocupantes si se tiene en cuenta que jamás en la historia un equipo ha logrado menos de 9 triunfos.
La proyección de los Spurs y los Wizards es de 11 victorias al finalizar la liga regular. La de los Pistons es más preocupante, porque si los de Monty Williams mantienen este ratio finalizarían con un balance de 7-75, que pasaría a ser el peor de todos los tiempos.
Los Pistons no regalan alitas de pollo
Al iniciarse la temporada 2023/2024, una famosa cadena de restaurantes especializada en alitas de pollo lanzó una promoción local en la que regalarían cinco unidades extra en las noches en las que los Pistons ganasen su partido. A día de hoy, ese cartel es objeto de mofa a nivel nacional, y por otro lado, una campaña de márketing fantástica, pese a ir ligada a uno de los mayores ridículos de la historia del baloncesto norteamericano.
Las noches en las que hubo alitas gratis, fueron únicamente dos, y fueron consecutivas. Las únicas dos victorias de los Pistons llegaron en duelos seguidos, con viaje de por medio, ante Charlotte Hornets y Chicago Bulls, allá por el 28 de Octubre.
Detroit es el noveno equipo en la historia de la NBA que alcanza 20 derrotas consecutivas.
Tienen un porcentaje de victorias de 8.7% y jamás un equipo ha terminado la temporada regular por debajo de un 10% de triunfos.
Los de Monty Williams son, claramente, candidatos a hacer historia negativa. Y es que además, el calendario no invita al optimismo teniendo en cuenta que en lo que resta de semana deberán cumplir doble partido ante los Sixers, en casa y fuera, para cerrar el sábado visitando Milwaukee.
La apuesta por un técnico subcampeón de la NBA como Monty Williams, así como el crédito ganado con su trabajo en los Thunder por parte de Troy Weaver, actual mánager general de los Pistons, no se refleja en un proyecto sin cabeza.
Las elecciones del draft en los últimos años pintaban bien, comenzando por Cade Cunningham, quien emerge como líder de un proyecto perdedor. Junto a él Jaden Ivey y Ausar Thompson, números 5 del Draft de 2022 y 2023 respectivamente, son lo único ilusionante en el Little Caesars Arena.
Wembanyama justifica la debacle
Saber que en sus manos tienen al jugador que va a dominar la NBA en el futuro, hace más llevadera la horrible racha de 17 derrotas de los Spurs. El impacto de Víctor Wembanyama ha sido inmediato, pero los equipos no viven de aparecer en los rankings de mejores jugadas, sino de ganar partidos.
“Lo bueno es que nadie duda de que en el largo plazo nosotros seremos los ganadores. Por supuesto que odio perder, pero estoy concentrado en el largo plazo”, comentó el pívot francés tras caer ante los Rockets.
Lo curioso es que dos de sus tres triunfos fueron ante los Suns en Arizona, en un momento en el que los de Popovich llegaron a situarse en un 3-2 que ilusionó. Aquella noche del 2 de Noviembre todo terminó, San Antonio no ha vuelto a ganar y la mirada ya sólo se centra en los dobles-dobles que 'Wemby' logra noche sí y noche también.
Wizards y el futuro de Poole
Los Washington Wizards podrían llevar 15 derrotas consecutivas de no ser porque el pasado 27 de noviembre se cruzaron con los Pistons y, evidentemente alguno de los dos tenía que perder. Es el único equipo al que los de Wes Unseld han doblegado desde hace un mes.
Washington no cuenta con una mala plantilla, Kyle Kuzma o el israelí Deni Avdija ya han demostrado sus capacidades previamente, y la llegada de Jordan Poole prometía muchos puntos y un juego más alegre de perímetro. La realidad es bien distinta.
Con este panorama, ya se habla más de posibles salidas de Poole, que permitan liberar los 124 millones apalabrados en su contrato para los próximos cuatro años.
Incluso un cambio de residencia aparece en el horizonte, que haría cruzar a los Wizards el río Potomac para instalarse en el estado de Virginia. Un pabellón más grande sólo aportará más butacas vacías mientras vivan instalados en la derrota.