Miami, 23 ago (EFE).- El senador republicano Marco Rubio pidió este miércoles al titular del Departamento de Justicia de EE.UU., Merrick Garland, que rechace el pedido de extradición a Colombia del líder paramilitar colombiano Salvatore Mancuso, que cumple una condena de más de 15 años de prisión por narcotráfico en este país.
Rubio escribió en una carta a Garland que no se puede conceder la extradición mientras el presidente de Colombia, Gustavo Petro, no revoque el nombramiento de Mancuso como “gestor de paz”, anunciado el pasado 23 de julio, o se brinden “garantías creíbles” de que pagará sus cuentas con la justicia colombiana.
El pasado 15 de agosto, el ministro de Justicia de Colombia, Néstor Osuna, dijo que Mancuso quedará en libertad cuando regrese a Colombia para ser gestor de paz, pero deberá responder por los procesos judiciales que tiene pendientes en el país.
“Permitir a Mancuso no solo andar libre en Colombia, sino también representar al Gobierno en negociaciones con traficantes de drogas que actualmente tratan de inundar nuestras comunidades con narcóticos sería un insulto para los miles de colombianos víctimas de los crímenes de Mancuso”, señala Rubio.
El senador por Florida dice que el nombramiento de Mancuso es “problemático”, dado que los tribunales federales de EE.UU. lo condenaron por tráfico de drogas en 2015 y los de Colombia por más de 1.500 asesinatos o desapariciones forzadas.
Mancuso está encarcelado en EE.UU. y todavía debe cumplir las sentencias de sus condenas colombianas, recuerda Rubio.
El senador muestra su preocupación por el hecho de que “recientes sucesos en Colombia”, que no especifica, puedan hacer que los responsables de las guerrillas de extrema izquierda y de las organizaciones paramilitares de extrema derecha no rindan cuentas ante la justicia por sus abusos.
Rubio recuerda a Garland que, según anunció Petro al nombrar a los “gestores de paz” el mes pasado, el cometido de esas personas será llevar a cabo negociaciones con grupos armados como parte de su plan “Paz Total”.
A Mancuso le correspondería negociar con el Clan del Golfo, el grupo de narcotráfico más importante del Colombia, surgido de remanentes de las disueltas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) de las que fue su máximo líder.
Mancuso fue extraditado a EEUU desde Colombia en 2008 junto a otros jefes paramilitares.
El Gobierno colombiano pidió en julio pasado a EE.UU. la extradición de Mancuso para que sea gestor de paz, después de que este aceptara el cargo en una carta enviada desde la cárcel de Georgia (sur de EEUU) donde está recluido.