Miami, 22 ago (EFE).- Un estudiante del condado de Sarasota, en la costa oeste de Florida (EE.UU.), fue arrestado este martes por amenazar en las redes sociales con detonar una bomba en el colegio de secundaria Venice High School, informó un medio local.
El alumno de la citada escuela, cuya edad y nombre no fueron revelados, fue arrestado por agentes del departamento de policía del condado de Sarasota (SCSPD, en inglés) tras ser alertado por la dirección de Venice High School.
El chico fue, además de arrestado, expulsado del colegio, pese a que se trató de una “broma”.
La falsa amenaza de bomba tuvo lugar en las redes sociales y se informó de esta publicación a las autoridades escolares de forma anónima, recogió hoy el canal Fox4.
Tras el reciente arranque del nuevo curso escolar se han reportado ya varios casos de detenciones por amenazas de tiroteos o bombas.
La semana pasada un joven de 22 años fue arrestado por amenazar también en las redes sociales con un tiroteo en el colegio de secundaria Loogers Run Middle School, en el condado de Palm Beach (sureste de Florida), dirigido a seis estudiantes de ese centro educativo del que fue alumno.
Fernando Gaete, radicado en la ciudad de Boca Ratón, fue arrestado y trasladado a una prisión del citado condado por el cargo de “amenazas escritas para llevar a cabo un tiroteo masivo o un acto de terrorismo”, recogió el canal local WPTV.
Según el informe del arresto, el departamento de policía del distrito escolar de Palm Beach recibió una llamada en la tarde del miércoles de una mujer que alertó de dos entradas publicadas en la plataforma social Discord.
“Yo Dominic Valentine prometo disparar en la escuela de secundaria Logger Run el lunes por la mañana contra 6 estudiantes”, decía la publicación.
El servicio de mensajería instantánea proporcionó a las autoridades la dirección IP que identificó al usuario del programa como Gaete, un exalumno de esta escuela, que se encuentra a solo dos millas (3 kilómetros) de su casa.
La Policía de los condados de Miami-Dade y Broward, en el sur de Florida, han instado en numerosas ocasiones a los padres a que recuerden a sus hijos que “cualquier amenaza, aunque piensen que es una broma, acarrea graves consecuencias”, ya que está considerado un delito grave de segundo grado, además de medidas disciplinarias escolares, incluida la expulsión.
Desde la matanza perpetrada en 2018 por Nikolas Cruz en el colegio Marjory Stoneman Douglas de Parkland, que costó la vida a 14 alumnos y 3 empleados, se han sucedido en este estado numerosas detenciones por amenazas de muerte y falsas amenazas con armas en colegios, la gran mayoría hechas por adolescentes.