Naciones Unidas, 25 jul (EFE).- El Reino Unido aseguró este martes tener información de que el Ejército ruso podría empezar a atacar barcos civiles en el mar Negro, ampliando así su reciente campaña de bombardeos contra puertos y almacenes de grano ucranianos.
La embajadora británica ante la ONU, Barbara Woodward, dijo a los periodistas que el primer ministro, Rishi Sunak, trasladó esa información al presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, durante la conversación telefónica que mantuvieron hoy.
“Nuestra información también indica que Rusia ha colocado más minas marinas en las entradas de puertos ucranianos y estamos de acuerdo con el análisis de Estados Unidos de que esto es un esfuerzo coordinado para justificar y tratar de culpar a Ucrania de cualquier ataque contra barcos civiles en el mar Negro”, dijo Woodward.
La diplomática, además, adelantó que el Consejo de Seguridad de la ONU se reunirá este miércoles a petición de Ucrania para discutir los ataques rusos contra Odesa y otras ciudades portuarias y su ruptura de la llamada iniciativa del mar Negro, que facilitaba la exportación de cereal ucraniano.
“Una vez más llamamos a Rusia a dejar de tomar como rehén el suministro global de alimentos y a volver al acuerdo del mar Negro”, dijo Woodward, repitiendo la petición hecha ayer por el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres.
Moscú, sin embargo, respondió hoy asegurando que en estos momentos es “imposible” reanudar el acuerdo del grano debido a que no se cumplen los compromisos con la parte rusa.
“Lamentablemente, en estos momentos es imposible retomar ese acuerdo, porque no se cumple”, dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa telefónica diaria.
Agregó, que efectivamente, el secretario general de la ONU, António Guterres, le presentó nuevamente al presidente ruso, Vladímir Putin, “una especie de plan de acciones y la promesa de que alguna vez se podrá cumplir la parte rusa” del acuerdo.
“El presidente Putin ha dicho claramente que Rusia está dispuesto a retomar de inmediatamente el acuerdo apenas se cumpla (la parte rusa)”, recalcó Peskov.
Moscú pide la reconexión del banco agrícola ruso Rosseljozbank al SWIFT, el levantamiento de sanciones a repuestos para la maquinaria agrícola, el desbloqueo de la logística y seguros de transporte, la descongelación de activos y la reanudación del funcionamiento de la tubería de amoníaco Togliatti-Odesa, que explotó el 5 de junio.