Redacción Deportes (EE.UU.), 12 jul (EFE).- El seleccionador de Panamá, Thomas Christiansen, destacó este miércoles la convicción con la que jugó este miércoles su equipo para superar en la semifinal de la Copa Oro a Estados Unidos, vigente campeón del torneo (1-1, 4-5 en los penaltis).
“Al final, puedes practicar mucho (los penaltis), pero creo que hoy la fe y las ganas han hecho que Panamá pasara a la final”, aseguró el técnico hispano-danés en una rueda de prensa.
Ante más de 30.000 personas en el Snapdragon Stadium de San Diego con aplastante mayoría de aficionados estadounidenses, Panamá se clasificó para su tercera final de la Copa Oro y optará a su primer título en este torneo tras perder las de 2005 y 2013.
El encuentro terminó sin goles tras los 90 minutos reglamentarios, Iván Anderson adelantó a la selección panameña en el 99 y el colombiano-estadounidense Jesús Ferreira empató para EE.UU. en el 105, lo que llevó la semifinal a los nervios de los once metros donde el equipo canalero, con dos penaltis atajados de Orlando Mosquera, cantó victoria.
“El partido contra EE.UU. podía para un lado o para otro. Sabíamos cómo iban a jugar, cómo había que jugarles a ellos. En la primera parte creo que estuvimos bastante bien en los últimos 20 minutos, conseguimos dominar el juego. En el segundo tiempo lo perdimos un poco”, reflexionó Christiansen.
El técnico ironizó con “lo que es el fútbol”, ya que contó que habían ensayado lanzamientos de penas máximas antes de este encuentro y les salió “fatal”.
“Hubo más errores que goles, con eso os digo todo”, apuntó.
Christiansen recalcó que esta era la segunda semifinal en tres semanas para Panamá, tras la que disputó en la Liga de Naciones de la Concacaf.
“Esto no pasa cada año. Hoy era el momento para aprovecharlo y meternos en esa gran final, que es el sueño de todo panameño, del cuerpo técnico, los jugadores, los que asisten al equipo… Todos se merecen este triunfo de hoy. Fue muy sufrido, pero es así cuando mejor se saborea”, explicó.
“Estoy contento con todos los jugadores (…). Ahora toca un trabajo duro de recuperación (para la final) porque si yo ya estoy muerto no quiero imaginar los jugadores…”, bromeó.
Christiansen admitió asimismo que creían “casi imposible” ganarle a EE.UU. “en su casa y con los aficionados arropándoles”.
“Pero las pocas esperanzas que había sobre nuestro lado había que agarrarlas. Y con fe e ilusión, como he dicho anteriormente, es donde hemos ganado el partido”. dijo.
“Ha sido un buen fútbol por parte de Panamá, proponiendo, teniendo en muchas ocasiones el control de partido, generando ocasiones. Hemos mejorado también en el aspecto defensivo. Así que, en general, si nos llevamos todo eso a la final podemos soñar un poco (…) Queremos ir todo el camino. Queremos llevar un título para Panamá, que se lo merece”, afirmó el entrenador, que pidió a su equipo seguir “con los pies en el suelo” para la final que se disputará el domingo en Los Ángeles.