Toronto (Canadá), 30 jun (EFE).- Las autoridades canadienses aconsejaron este viernes a los habitantes de Toronto, la ciudad más poblada de Canadá, que se queden en sus hogares y advirtieron que la mala calidad del aire debido al humo de los incendios forestales que asolan el país supone un “elevado riesgo” para su salud.
El Servicio Meteorológico de Canadá dijo este viernes que la calidad del aire de Toronto está entre las peores del mundo y recomendó que se limiten o cancelen las actividades al aire libre.
Además, el humo está causando un descenso de la visibilidad en toda la ciudad, en la que viven más de 2,6 millones de personas aunque con su área metropolitana, que engloba varias ciudades-dormitorio, la cifra asciende a unos 6 millones de habitantes, una séptima parte de la población de Canadá.
Los meteorólogos también advirtieron que a partir del sábado, además del humo, grandes partes de la provincia de Ontario, donde se encuentra Toronto, sufrirá elevadas temperaturas que llegarán a los 35 grados.
En la capital canadiense, Ottawa, y en Montreal, la segunda ciudad más poblada del país, el riesgo para la salud también es elevado por la mala calidad del aire.
CIFFC, la agencia que coordina la respuesta a los incendios forestales en Canadá, señaló este viernes que hay 500 fuegos activos en el país y que este año las llamas han consumido ya 81.000 kilómetros cuadrados de bosque, la cifra más elevada en la historia moderna del país y equivalente al tamaño de Austria.
Las condiciones han obligado a que algunas localidades cancelen los tradicionales espectáculos de fuegos artificiales que forman parte de las celebraciones del 1 de julio, la fiesta nacional, y sustituirlos en los cielos con las luces de drones.
Este viernes, Quebec tenía activos 102 incendios forestales que son los responsables del humo que se extiende por Toronto, Ottawa y Montreal, así como gran parte del este de Estados Unidos e incluso el sur de Europa.
Este viernes, las autoridades canadienses anunciaron la llegada de 151 bomberos surcoreanos para ayudar en las tareas de extinción de los incendios en Quebec.
Los bomberos surcoreanos reemplazarán a los 100 españoles que el jueves completaron una misión de dos semanas en Quebec. El personal español era parte de un contingente europeo, que también incluye bomberos de Portugal y Francia, que respondió a la petición de ayuda que por primera vez Canadá realizó este año a la Unión Europea (UE).
El embajador de España en Canadá, Alfredo Martínez Serrano, que el jueves acudió a Quebec a despedir al contingente español, señaló que la presencia de los 100 bomberos españoles “es un hito” y recordó que desde los años setenta del siglo XX, en España las labores de extinción de incendios se realizan con la ayuda de aviones anfibios canadienses.
Los bomberos españoles han declarado a EFE que la magnitud de los incendios forestales de Canadá es algo a lo que nunca se habían enfrentado antes, con fuegos incontrolables que durarán meses.
En Columbia Británica, en el oeste de Canadá, el mayor incendio de la historia de la provincia ya supera los 5.745 kilómetros cuadrados de superficie quemada, un área mayor que la extensión de la comunidad de Cantabria en España.
Las autoridades provinciales han señalado que no pueden combatir el incendio de Donnie Creek y que tendrán que esperar a que las llamas se extingan de forma natural en el invierno con la llegada de lluvias y nieve a la región.
En total, cerca de 1.500 bomberos de Australia, Chile, Costa Rica, España, Estados Unidos, Francia, México, Nueva Zelanda y Portugal han acudido este año a Canadá para colaborar en las tareas de extinción de incendios forestales ante la histórica oleada de fuegos.