Washington, 22 jun (EFE).- La calidad de los nuevos coches en Estados Unidos ha empeorado de nuevo en 2023 por segundo año consecutivo, según los resultados del Estudio de Calidad Inicial (ECI) que realiza anualmente la firma J.D. Power.
El estudio, basado en las respuestas de 93.380 propietarios de vehículos nuevos de 2023, constató que este año la media de problemas por cada 100 vehículos (PP100) detectados se situó en 192, 12 más que el año pasado y 30 más que en 2021.
Los datos señalan que entre los fabricantes de consumo masivo, la marca con más calidad inicial es Dodge, que sólo registró una media de 140 PP100, seguido de Ram (el especialista de camionetas “pickup” y furgonetas del grupo Stellantis), con 141 PP100, y Buick (la marca de la gama alta de GM), con 162 problemas por cada 100 vehículos.
Entre las marcas de lujo, Alfa Romeo tuvo 143 PP100, Porsche 167 PP100 y Cadillac (la marca de lujo de GM) 170 PP100.
Por el contrario, las marcas más problemáticas fueron las eléctricas Polestar con 313 problemas por cada cien vehículos y Tesla con 257 aunque oficialmente no entran en la clasificación de J.D. Power porque no permiten los sondeos a propietarios de coches en aquellos estados en los que es necesaria la autorización de las empresas.
Por modelos y segmentos, los coches con más calidad inicial fueron Kia Rio, Audi 3, Kia Forte, Lexus IS, Mini Cooper, BMW Serie 8, Toyota Camry, Kia Stinger, Chevrolet Camaro, Chevrolet Corvette y Genesis G80.
Frank Hanley, representante de J.D. Power, declaró en un comunicado que la pérdida de la calidad de los nuevos vehículos es algo sin precedente tras décadas de continúas mejoras de la media del sector.
“El sector del automóvil encara un gran variedad de problemas de calidad, un fenómeno que no hemos visto en los 37 años de historia de ECI”, afirmó Hanley.
Hanley reconoció que los nuevos coches son cada vez más complejos, “con tecnologías nuevas y apasionantes”, aunque esta mayor complejidad y tecnología “no siempre satisface a los clientes”.
El estudio de J.D. Power reveló que el mayor incremento en el número de problemas se concentra en la categoría de pantallas, controles y funciones (3,2 PP100). El aumento de los problemas de los sistemas de “infotenimiento” fue el segundo con una subida de 2,3 PP100.
En este sentido, ECI constató que cada vez es más difícil abrir las puertas de los coches porque los fabricantes insisten en volver a diseñar un equipamiento que ha sido uno de los aspectos de los vehículos menos cuestionados.
Pero la adopción de tecnologías punta en el diseño de las manillas ha convertido la apertura de las puertas en un creciente problema. Y siete de los 10 modelos más problemáticos en este aspecto con vehículos eléctricos.