Los Ángeles, 15 jun (EFE).- Todos los 42 migrantes que llegaron a Los Ángeles en un autobús fletado por el Gobierno de Texas tienen familiares o amigos en California o en otras partes del país que les brindarán apoyo, informó este jueves un vocero de la organización L.A. Welcomes Coalition.
Los migrantes llegaron en la tarde del miércoles a la estación de transportes en el centro de Los Ángeles y fueron recibidos por miembros de la coalición, formada por cerca de media docena de organizaciones comunitarias, la Arquidiócesis Católica de Los Ángeles y la ciudad.
Entre los 42 extranjeros había 13 menores de edad, dos de ellos bebés, y dos personas de la tercera edad.
Jorge Mario Cabrera, vocero de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes (CHIRLA), que hace parte de la coalición, dijo hoy que ayer mismo varias familias fueron recogidas por sus familiares después de recibir atención médica y legal.
“Todos tienen raíces en el estado o en el país”, lo que supone que no permanecerán en el refugio adaptado para recibirlos, dijo Cabrera en una rueda de prensa.
Varias familias fueron enviadas la noche del miércoles a sus destinos finales en ciudades como San Francisco y San Diego.
Dentro del grupo que llegó había venezolanos, hondureños, guatemaltecos y un asiático.
Este es el primer autobús enviado a California por el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, como parte de una medida adoptada en abril del 2022 para trasladar migrantes desde la frontera a ciudades y estados demócratas en protesta contra la política migratoria del presidente Joe Biden, un gesto muy criticado por organizaciones de derechos humanos.
En un mensaje en su cuenta de Twitter, Abbott dijo hoy que Texas transporta a los migrantes “a santuarios autoproclamados” como Los Ángeles para brindar alivio a las comunidades fronterizas, y advirtió que seguirá haciéndolo.
Por su parte, la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, dijo en un comunicado que es “abominable que un funcionario estadounidense elegido utilice seres humanos como peones en sus juegos políticos baratos”.
Agregó que el envío de autobuses no tomó desprevenida a la ciudad, que ya estaba lista para recibir a los migrantes.“No nos intimidará”, aseveró.