Redacción Deportes, 13 jun (EFE).- El español Jon Rahm, número 2 del mundo, afirmó este martes, en vísperas del Abierto de Estados Unidos, tercer ‘major’ de la temporada de golf y que se juega de jueves a domingo en el Los Ángeles Country Club, que su “nivel de confianza es muy alto” para tratar de ganar un torneo en el que se impuso en 2021.
“Mi fe en mí mismo es la misma. No he jugado mi mejor golf en las dos últimas salidas, aunque en realidad jugué muy bien en el Memorial. Simplemente no pude hacer los putts que necesitaba para mantener las rondas. Pero creo que terminé decimosexto un campo muy difícil. Le pegué muy, muy bien. Obviamente, el PGA fue duro”, dijo este martes en una rueda de prensa al referirse al anterior ‘grande’.
“Mi nivel de confianza es muy alto. Tienes que creer en ti mismo como un competidor, no importa lo que pase. Te apegas al proceso… Eso es básicamente lo que creo que ha sucedido este año. No he cambiado realmente”, agregó el vizcaíno.
Jon Rahm cree que “no hay una fórmula mágica” en el golf. “Trabajo en las cosas en las que tengo que trabajar, y cuando haces las pequeñas cosas correctamente, con el tiempo los resultados vienen, y eso es lo que me ha pasado este año. A finales del año pasado y principios de éste”, precisó.
“SERÍA OTRO HONOR DARLE A ESPAÑA EL MAJOR NÚMERO 11”
Sobre el hecho de ser el único español en haber ganado el US Open, señaló con humor: “Dado que soy el único español que ha ganado este torneo, soy el único que puede hacerlo dos veces”.
“Obviamente sí, es muy motivador. Si vamos por ese camino, seguir sumando a la lista española de grandes campeonatos, es un verdadero honor. Fue un honor dar a España el grande número 10 y sería otro honor darle el 11”, incidió.
“TODAVÍA HAY DEMASIADAS PREGUNTAS QUE DEBEN SER CONTESTADAS”
Sobre el reciente acuerdo entre el PGA Tour, el DP World Tour y el LIV Golf, Rahm dijo: “Creo que se llega a un punto en el que uno desea tener fe en la gestión, y quiero tener fe en que esto es lo mejor para todos nosotros. Pero está claro que ese no es el consenso. Creo que el sentimiento general es que mucha gente siente un poco de traición”.
“No es fácil para un jugador que ha estado involucrado (en el PGA Tour), al igual que muchos otros, despertarte un día y ver esta bomba. Por eso estamos todos en un poco de un estado de limbo porque no sabemos lo que está pasando”, añadió al respecto.
“Es un estado de incertidumbre que no nos gusta, pero al final yo no soy un experto en negocios. Algunos de esos tipos en la junta e involucrados en esto lo son. Así que me gustaría pensar que van a tomar una decisión mejor que yo, pero yo no sé. Ya veremos. Todavía hay demasiadas preguntas que deben ser contestadas”, subrayó.
“ESTOY EN UN ESTADO DE PRIVILEGIO MUY ALTO EN ESTE MUNDO”
“Pase lo que pase, esté de acuerdo o no, doy las gracias al PGA Tour por haberme dado una plataforma para jugar al golf al más alto nivel. Estoy en una situación en la que mi familia y mis hijos no tienen que luchar financieramente, y no sé a cuántas generaciones puedo ayudar si lo hago bien”, agregó.
“Estoy en un estado de privilegio muy alto en este mundo. Puedo hacer lo que quiero. Puedo ganarme la vida haciendo lo que me gusta. Me lo paso en grande cada día, aunque me enfado en el campo de golf de vez en cuando. Al final sigo siendo muy privilegiado. Soy feliz donde estoy en mi vida, y cada día por la mañana, cuando miro a mis hijos, me siento aún más bendecido en ese sentido”, comentó.
EL CAMPO DE LOS ÁNGELES ES “ENGAÑOSAMENTE ANCHO”
Al referirse al escenario del torneo, el Los Ángeles Country Club, que por primera vez acoge un ‘major’, Rahm señaló: “Es difícil decir un plan de juego. Es el US Open: calles y greenes. Con suerte, hacer dos putts y seguir adelante”.
“Creo que es (un campo) engañosamente ancho. Esas calles parecen más grandes de lo que son. Necesitas pegarle muy bien de tee a green para ser capaz de darte algunas oportunidades de birdie. Es un diseño que me gusta. Te hace pensar. Tiene greenes muy complejos. Si fallas los greenes te vas a encontrar en algunos lugares interesantes. El campo lo tiene todo y tiene todos los ingredientes para ser una gran semana”, afirmó.
Además de Jon Rahm, en el Abierto de Estados Unidos habrá otros cuatro españoles: Sergio García, Pablo Larrazábal, Alejandro del Rey y David Puig.