Nueva York, 19 abr (EFE).- La ciudad de Nueva York ha acordado pagar hasta 53 millones de dólares en total (48 millones de euros) a más de 4.000 detenidos en espera de juicio que fueron encerrados ilegalmente en celdas de aislamiento hasta 23 horas por día, según documentos judiciales.
La ciudad tendrá que indemnizar a aquellas personas detenidas que fueron confinadas en celdas de aislamiento por haber quebrantado alguna norma de la prisión en la que esperaban el arranque de su proceso, incumpliendo con el protocolo legal, que exige la celebración de una audiencia.
Se trata de dos instalaciones situadas en la prisión de Rikers Island y una tercera sita en el Centro Correccional Metropolitano.
Según el acuerdo, cada una de las 4.413 personas que sufrieron este trato podrá cobrar hasta 12.000 euros, de los que se deducirá el 25 % para el pago de tasas, abogados y costos.
En la demanda, los abogados calificaron de inconstitucional esta práctica de “colocar a un número considerable de personas encarceladas en instalaciones de confinamiento aislado por tiempo indefinido sin el debido proceso y con fines ilegítimos”.
Las condiciones de los presos en Nueva York, sobre todo en la denostada cárcel de Rikers, son periódicamente criticadas por activistas y organizaciones de los derechos humanos.
Las malas condiciones llevaron a la anterior administración municipal a decretar su cierre progresivo, una cuestión que ha quedado en el aire con el nuevo alcalde, Eric Adams.
El pasado 5 de abril, la asociación de defensa de los derechos civiles Unión de Libertades Civiles de Nueva York (NYCLU) auspició otra demanda colectiva contra el confinamiento ilegal en los presidios neoyorquinos.
Para la ONG, “la reclusión en régimen de aislamiento es la forma más extrema de castigo utilizada en Estados Unidos fuera de la pena de muerte y causa graves traumas, al tiempo que se relaciona con mayores tasas de reincidencia y una reducción de la seguridad pública”.
Según NYCLU el Departamento de prisiones ha incumplido las actuales normas de régimen de aislamiento que estipulan un tiempo máximo de 17 horas diarias durante un periodo inferior de 15 días.