Ciudad de México, 2 mar (EFE).- Con la llegada de la planta de Tesla, la más grande del mundo en su tipo, México se perfila para ser la potencia de vehículos eléctricos en Norteamérica y el mundo, dijo este jueves José Zozaya, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), en entrevista con EFE.
“En Norteamérica, entendido como México, Estados Unidos y Canadá, ahí deberíamos de ser la potencia mundial, deberíamos de llegar a serlo, si no es que ya lo somos. Una fábrica de esta magnitud claro que da un brinco tremendo para nuestro país”, comentó.
Sus declaraciones se producen tras anunciarse que Tesla llegará al norteño estado de Nuevo León con una megafábrica que detonará una inversión superior a los 5.000 millones de dólares clave para alcanzar su meta anual de fabricar 20 millones de unidades anuales a niveles mundial.
Esta nueva armadora en el municipio de Santa Catarina, en la zona metropolitana de Monterrey, será la primera de producción de automóviles de Tesla en Latinoamérica y la quinta de todo el mundo, tras las que ya operan en Fremont y Austin (Estados Unidos), Shanghái (China) y Berlín (Alemania).
MÉXICO: MOTOR DEL MUNDO
Ante esto, Zozaya señaló que la inversión fortalece el liderazgo de México en la industria automotriz en el mundo, donde ya es el quinto exportador y el séptimo fabricante de vehículos ligeros.
Explicó que, tan solo en 2022, se exportaron 2,5 millones de vehículos ligeros, por lo que “si se suma un millón de autos más, está aumentando casi el 50 %”, con base en las proyecciones de producción de Tesla.
El presidente de la AMIA, que aglutina a las empresas del sector, que en México aportan casi 4 % de la economía y más del 20 % del producto interior bruto (PIB) industrial, dijo que la instalación de esta planta genera motivación y entusiasmo en la industria.
También reconoció la gran capacidad de México y, sobre todo, “la gran experiencia y calidad de la mano de obra mexicana del sector automotriz con más de 100 años de experiencia en este sector”.
En este sentido, Zozaya resaltó que la decisión del magnate Elon Musk, dueño de Tesla, “es un gran reconocimiento a la gran calidad de la mano de obra mexicana”.
“Varias de las plantas que ya tenemos en nuestro país y que hoy son socios de nuestra asociación presumen en el mundo que las plantas de mayor calidad que tienen están en México y esto esperemos que también sea el mismo caso con esta nueva planta que va a llegar al estado de Nuevo León”, expresó.
FÁBRICA DE EMPLEOS E INVERSIÓN
El líder del sector también detalló que esto beneficiará a la región con nuevas posiciones, desde seguridad, técnicos, ingenieros mecatrónicos, y hasta en ramos administrativos, para las que auguró salarios competitivos.
Asimismo, esperó que Tesla se comunique con la AMIA para colaborar en conjunto.
“Esperamos tener comunicación con ellos y ojalá les interese formar parte de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz, que agrupa a las armaduras e importadoras de vehículos ligeros nuevos para México”, dijo.
La AMIA integra a la mayoría de empresas de autos en México como Audi, BMW, Mercedes-Benz, Nissan, Ford, General Motors, Honda, Renault, entre otras.
MÉXICO SE CONSOLIDA COMO DESTINO DE INVERSIÓN
Por su parte, la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) enfatizó que la nueva armadora de autos de Tesla consolida a México como destino de inversión para vehículos eléctricos.
“Los efectos favorables en la generación de empleo, consolidación y desarrollo de proveedores, así como el nivel de confianza que aporta para la toma de decisiones de otros actores de la industria automotriz para invertir en México son algunos de los beneficios”, manifestó Guillermo Rosales Zárate, presidente de la agrupación.
Rosales consideró que esta inversión deriva del cumplimiento de las nuevas reglas de origen del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), la relocalización de cadenas o “nearshoring” y los incentivos que ofrecerá Washington para la adquisición de vehículos eléctricos.
Sin embargo, también reconoció que la falta de planeación estratégica en México y la insuficiente infraestructura “son retos que se tienen que atender de manera urgente”.