Redacción Deportes (EE.UU.), 15 dic (EFE).- Los San Antonio Spurs, con 36 puntos de un extraordinario Devin Vassell, le ganaron este viernes por 129-115 a Los Ángeles Lakers y cortaron su racha de 18 derrotas consecutivas en el primer choque generacional entre el francés Victor Wembanyama y LeBron James.
Los Spurs se reencontraron con un triunfo que les faltaba desde el 2 de noviembre. Ganaron entonces a los Phoenix Suns y lucían un balance de 3-2, antes de encadenar 18 derrotas seguidas que les hundieron al fondo de la Conferencia Oeste.
Los texanos se habían quedado cortos dos días antes contra los Lakers (119-122), sin LeBron, pero reaccionaron este viernes ante unos angelinos que no pudieron contar con Anthony Davis ni D’Angelo Russell.
Fue una liberación para los Spurs de Gregg Popovich, que vivían la peor racha perdedora de su historia. Tienen ahora un balance de 3-21, mientras que los Lakers perdieron su undécimo partido del curso (15-11).
En la batalla generacional entre Wembanyama, la primera elección absoluta del último draft, y LeBron, flamante campeón de la Copa de la NBA a sus 38 años, fue Vassell en acaparar los reflectores con 36 puntos (12 de 19 en tiros y cinco triples).
Wembanyama firmó un doble doble de trece puntos y quince rebotes, mientras que LeBron fue el máximo anotador de los Lakers con 23 puntos, siete rebotes y catorce asistencias, aunque sólo anotó cinco en la segunda mitad.
A pesar de muchos altibajos, los Spurs nunca estuvieron abajo en el marcador contra los Lakers. Wembanyama y LeBron intercambiaron señales con unos poderosos mates con una mano, pero fueron los texanos en tener el mejor arranque grupal.
El equipo de Popovich, con siete triples en poco más de un cuarto, se escapó hasta el más 25 en el marcador (49-24), aprovechando los apuros de unos Lakers que comenzaron con un muy modesto dos de trece desde el arco.
LeBron tuvo un partido complicado y, entre el segundo período y el comienzo del tercero, recibió hasta tres golpes en la zona de los ojos. Dos veces en unos choques con sus rivales, y una por un impacto con su compañero Rui Hachimura.
Pero si los Lakers no se descolgaron del partido ante el poderoso arranque de los Spurs fue mérito de King James. Disputó un segundo cuarto estelar, en el que anotó doce puntos y repartió hasta nueve asistencias, dando ritmo, entre otros, a un Austin Reaves que llevaba 14 puntos al descanso.
Liderados por LeBron, los Lakers firmaron un parcial de 22-56 que les acercó a diez puntos (62-52). El margen se redujo hasta los cuatro puntos en el 66-62 y los angelinos perdían por siete al ecuador del choque.
Sin embargo, tras el descanso, LeBron anotó su primer punto de la segunda mitad tras casi diez minutos de partido y Wembanyama, con el triple del 81-65, y Vassell, con un asombroso ritmo anotador, llevó de la mano a los Spurs.
Llevaba 15 puntos al descanso y sumó once en el tercer período, en el que los texanos incrementaron su ventaja hasta el 98-87.
Vassell no dejó de pisar el acelerador y anotó otros diez puntos en el cuarto período, en el que la ventaja de los Spurs tocó los veinte puntos en el 118-98, lo que puso la sentencia virtual.
LeBron regresó al banquillo con cinco minutos por jugar en el cuarto período, una señal clara de que los Lakers dieron por perdido el encuentro.
Los Spurs pudieron celebrar un triunfo mes y medio después de la última vez y se prepararán ahora para otro choque exigente, contra los New Orleans Pelicans.
Andrea Montolivo