Toronto (Canadá), 20 dic (EFE).- Los Denver Nuggets se impusieron en Toronto a los Raptors por 104-113 en otra noche más en la que el pívot serbio Nikola Jokic terminó con un doble-doble y acabó con los sueños de última hora de los locales de remontar en el marcador.
Jokic fue el máximo anotador del partido con 31 puntos a los que sumó además 15 rebotes, seis asistencias y dos tapones. Mientras, el base de los Nuggets, Jamal Murray, acabó la noche con 20 puntos.
En los Raptors, sólo Scottie Barnes estuvo a la altura de Jokic. El jugador de los de Toronto también consiguió un doble-doble, con 30 puntos y 10 rebotes, además de cinco asistencias. Su compañero Pascal Siakam anotó 18 puntos.
Tras aplastar a los Dallas Mavericks de Luka Doncic el lunes (130-104) en una noche discreta de Nikola Jokic, los actuales campeones de la NBA llegaban a Toronto terceros en la Conferencia Oeste por detrás de los Minnesota Timberwolves y los Oklahoma City Thunder.
Si los Nuggets están todavía por debajo del nivel que consiguieron en la pasada temporada, los Raptors están intentando definirse tras el fin de la era de Nick Nurse en el banquillo y la llegada este año del serbio Darko Rajakovic, exentrenador del Espacio Torrelodones (2009-2012).
La columna vertebral de los Raptors son Pascal Siakam y Scottie Barnes y cuentan este año con el refuerzo del base alemán Dennis Schroder. Pero con un banquillo reducido, los excampeones de la NBA (en la temporada 2018-2019), están condenados a los puestos mediocres de la tabla.
Los Raptors iniciaron el partido entonados, con Siakam y Barnes funcionando en defensa y ataque lo que les permitió situarse seis puntos arriba en el marcador, 9-3, en los cuatro primeros minutos.
Pero todo fue un breve espejismo. La máquina de los Nuggets empezó a funcionar con Jokic y Murray como engranajes principales. La defensa de los de Denver se cerró y los Raptors mostraron sus debilidades.
Para cuando terminó el primer cuarto, los visitantes estaban nueve puntos arriba, 20-29. Los tiradores de Raptors no encontraban resquicios y el equipo de Toronto sólo tenía un 12,5 % de porcentaje en los tiros de tres, uno de ocho intentos.
En el segundo cuarto, los Nuggets siguieron apretando en defensa y la ventaja de los de Denver aumentó ante unos Raptors que eran incapaces de concentrarse.
Los Nuggets, que en el primer cuarto no habían robado ni un sólo balón sumaron siete en el segundo cuarto. A falta de seis minutos para el descanso, y con el marcador en 33-41, Murray le robó la cartera a Gary Trent Jr. en el centro de la pista para anotar dos puntos fáciles.
La acción de Murray dio pasó a un parcial de 0-8 y, tras dos robos más, los Nuggets se pusieron 16 arriba, 33-49.
Cuando los dos equipos se fueron al vestuario en el descanso, el marcador reflejaba un justo 44-61. Sólo Barnes, con 14 puntos en el segundo cuarto, funcionaba en los Raptors.
Tras el descanso, los locales mejoraron su defensa. Los Raptors limitaron sus pérdidas de balón a dos en el tercer cuarto (robaron el mismo número) y pusieron tres tapones a los jugadores de los Nuggets, la primera vez en el partido que hicieron más que sus rivales.
El esfuerzo se notó y los Raptors consiguieron en el cuarto dos puntos más, 31, que los Nuggets, lo que dejó el marcador al final del tercer periodo en 75-90.
En los últimos 12 minutos, los locales apretaron todo lo que pudieron a los campeones de la NBA sobre todo a base de pases y tiros interiores mientras que los Nuggets dependían de tiros de larga distancia.
Fue el mejor momento de los Raptors que endosaron a los Nuggets un parcial de 12-1 que les permitió pasar de 79-95 a 91-96 en poco más de tres minutos.
El susto fue suficiente para que Jokic impusiera orden. El serbio anotó nueve de los 17 puntos finales de los Nuggets y acabó con los sueños de los Raptors de remontar el partido en los minutos finales, dejando el marcador en el definitivo 104-113.